¿Hasta qué punto el objeto mostrado se refiere a un mundo mejor?

Una vis­ta de mi jar­dín en medio de una gran ciu­dad en el nor­te de Ale­ma­nia mues­tra un peque­ño paraí­so para los seres huma­nos y los ani­ma­les y al mis­mo tiem­po una con­tri­bu­ción al rever­de­ci­mien­to de la ciu­dad.

Así es como imagino un mundo mejor:

Mi ciu­dad del futu­ro es ver­de: Las facha­das de las casas, los teja­dos y los bal­co­nes, los árbo­les y las fran­jas de flo­res ofre­cen un hábi­tat para los insec­tos, los pája­ros y otros ani­ma­les peque­ños. Nume­ro­sos jar­di­nes, par­ques y espa­cios ver­des for­man los pul­mo­nes ver­des de la ciu­dad. Jun­tos pro­por­cio­nan som­bra, alma­ce­nan agua de llu­via, mejo­ran el cli­ma urbano y nos per­mi­ten res­pi­rar. Estos oasis son al mis­mo tiem­po reti­ros, luga­res de des­ace­le­ra­ción y luga­res de encuen­tro para per­so­nas de todas las gene­ra­cio­nes, cul­tu­ras y cla­ses socia­les. Pro­yec­tos como los Jar­di­nes Inter­na­cio­na­les, la Jar­di­ne­ría Urba­na o la Per­ma­cul­tu­ra crean opor­tu­ni­da­des para la acción con­jun­ta, la eco­lo­gía soli­da­ria a peque­ña esca­la. ¡Haga­mos nues­tras ciu­da­des ver­des!

Este texto fue traducido por una máquina. Ver texto original.